¿Pet friendly en un condominio?
Durante estos años me ha tocado convivir y participar en múltiples asambleas, juntas y reuniones de vecinos en donde tratan siempre temas de convivencia.
Me he dado cuenta, que hay dos tipos de personas. A los que les gustan los animales, y a los que no les gustan los animales.
Uno pensaría que el ser humano es mucho más complejo que eso, pero con los años he encontrado un denominador común en este aspecto.
Hay un dicho que he escuchado muchas veces: no te fíes de una persona a la que no le gustan los animales… y en muchas de las ocasiones, tienen razón. ( ojo, siempre hay excepciones como así he comprobado ).
Cuando la gente convive en una comunidad “organizada”, en la que deben atender reglas establecidas por un reglamento, siempre hay gente que no las respeta o que les cuesta más entenderlas. Especialmente en Costa Rica donde todavía la noción de vivir en una comunidad organizada en edificio es algo relativamente nuevo.
Muchas veces cuando atiendo clientes nuevos, me hacen esta pregunta: ¿se pueden tener mascotas?
Me cuesta entender que todavía hoy, haya edificios o comunidades en las que no estén permitidas las mascotas ( hablemos normalmente de perros ).
Puedo entender que las mascotas no estén permitidas en ciertos restaurantes, en ciertos lugares, pero que en el lugar donde vives, en tu casa, esté prohibido por reglamento la tenencia de mascotas, sería motivo sine qua non por el cual yo no viviría ahí y se que muchos de mis clientes tampoco.
Somos los seres humanos los que establecemos estas normas escritas y estos reglamentos, y somos los mismos seres humanos los responsables de convivir con ellos, de obedecerlos, de entenderlos o de cambiarlos.
Nuestras mascotas se rigen por un comportamiento mucho más simple, mucho más básico y mucho más feliz! Es por ello, que cuando siempre llegamos a casa, nuestras mascotas nos reciben con la mayor de las alegrías! Simplifican lo importante de la vida a un par de conceptos y sobre ellos siempre se basan.
El hecho de que nuestras mascotas no recojan sus heces no es una excusa para que nosotros no las recojamos. Si tenemos una mascota tambien tenemos una responsabilidad y obligación, tanto con nosotros mismos, como con nuestros vecinos y con la mascota misma.
Lo mismo ocurre con nuestra manera de tratar, guiar y corregir a nuestra mascota cuando estamos en el exterior con otra gente.
Si nuestra mascota es de una raza con características muy marcadas, de gran porte y que puede ocasionar miedo a otros vecinos, debemos siempre atender la prioridad de que ante un eventual caso de emergencia, podamos controlar a nuestra mascota, y si no somos capaces es mejor no tenerla o buscar otra raza.
Me ha tocado ver como por un desconocimiento, por una falta de entrenamiento y por una falta de responsabilidad, el perro de un vecino agrede al perro de otro vecino llegando a matarlo. Si tu mascota tiene cualidades para poder matar a otro animal, debes considerar ese hecho y estar siempre en la condición de que eso puede suceder. Puede suceder incluso con una persona o con un niño.
Desgraciadamente aqui en Costa Rica todavia no esta muy regulado este aspecto.
Ahora bien, tampoco es correcto si tu perro es de una raza pequeña y que difícilmente puede ocasionar una lesión a alguien, lo lleves sin correa en aquellas zonas donde no está permitido. Que tu perro sea pequeño e inofensivo, no significa que no pueda ocasionar problemas a los demás. Por lo tanto, igual responsabilidad y compromiso debería existir entre el caso anterior y este.
Las mascotas NUNCA tienen la culpa, somos sus dueños los culpables de lo que acontezca, y si no estamos dispuestos, mejor no tengamos. Pero estoy casi seguro de que todos los que se estén tomando el tiempo para leer este escrito estarán de acuerdo conmigo.
Una mascota generalmente es la mejor decisión que uno puede tener. Será tu compañero de viaje, incondicional y te dará momentos infinitos de felicidad. Despertara una sonrisa en ti por muy mal que haya ido el día.